No digas hoy es la fecha del vacío

Creer, creer en el susurro verde que extingue la soledad del número.
Creer en el silencio heráldico que cubre el origen de las flores silvestres.
Se celebrarán las antiguas ceremonias de los ocasos,
creeremos en el que danza, junto al fuego, en la noche
de las resurrecciones.

No digas hoy es la fecha del vacío.

Pronuncia la certeza de la luz, la primera palabra, la que desconoció la ronca sombra de la muerte, la que brotó de la fuente de la belleza, y nos miró con ojos de agua.
Sólo somos un despojo, estrellas frías -dices-,
y desconocemos el lenguaje de las germinaciones.
Pero creeremos, creeremos en el giro sucesivo del sonido, cuando los sueños de vidrio se extiendan, en vertical,
como la rotunda afirmación de una herida ante el infinito.
Creer, creer en el susurro verde que extingue la soledad del número.
Creer en el silencio heráldico que cubre el origen de las flores silvestres. Junto al fuego, en la noche de las resurrecciones.

No digas hoy es la fecha del vacío